Increíble Iglesia que no parece ser de los más visitados pero llama la atención
Esta Iglesia que se encuentra junto a la Catedral de Santa María de la Encarnación ocupa también una pequeña parte de los jardines que pertenecieran al que fuese el Claustro Cisterciense de Santa Ana, fue por allí desde donde ingresé, y es un espacio dedicado a la Adoración del Santísimo. Si bien es cierto visité dos veces la Catedral recién fue este año que descubrí la existencia de esta Iglesia que tal como dijese anteriormente perteneció al antiguo Claustro de las Monjas de Clausura. De acuerdo a los archivos que en los que pude encontrar referencias a la misma se encuadraría dentro del período que abarca los siglos XV al XVIII y es de estilo “gótico isabelino”. Si bien ingresé para hacer mi diaria visita al Sagrario, sea el sitio del mundo en que me encuentre, llamó mi atención su magnífico e impecable “retablo plateresco” de “abúndate decoración” que se encuadraría dentro de un estilo de la arquitectura española de fines del siglo XV, se respiraba allí un silencio y una devoción dignas mención. Tomé tan sólo unas pocas fotografías con la cámara sin flash y sin sonido y me quedé allí largo rato en la contemplación del Santísimo expuesto.
