Marta Pilar
La plaza con el poema de las ranitas
En esta plaza realmente bella, con mucha sombra fresca, cantidad de árboles, farolas y plantas floridas, rodeada de elegantes locales, con una lindísima fuente central adornada con verdes ranitas y con su chorro de agua en eterno movimiento, encontré una placa firmada por Carola Herrero Lima que dice lo siguiente “Había en Marbella una placita pequeña con una fuente preciosa.
Sus surtidores de agua eran ocho ranitas de piedra que alegraban a todo el mundo con sus gorgoritos.
Un día, un niño que venía de un lugar lejano se acercó a la fuente, quiso tocar el agua y se apoyó suavemente en la ranita más pequeña.
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