Vuelos, vuelos y más vuelos
¡Cuántos vuelos! No me extraña que este sea uno de los aeródromos más grandes de Europa. Es más, a nivel mundial, es el que más carga mueve de todos. Junto con el Charles de Gaulle de París (Francia) y el Heatrhow de Londres (Reino Unido) se incluye en el podium de los más transitados.
Con estas dimensiones no es de extrañar que cuente además con un gran número de tiendas y restauranets en los que pasar el tiempo mientras esperas tu vuelo y/o conexión. Si andas más pelao que pelao aprovecha los puestos de Lufthansa de café, te y chocolate gratis. Son de barra libre, ¡puedes tomar cuantos quieras! Asimismo, esta compañía pone a disposición de los pasajeros numerosos periódicos en alemán e inglés así como mesitas para disfrutar del combo.
El aeropuerto en cuestión cuenta además con numerosos asientos, algunos con reposapies incluso, y tiene enchufes por todos lados (algunos en las paredes, otros junto a los asientos). También hay apestosas cabinas para fumadores y media hora de WIFI gratis (infinito WIFI gratis si vas conectandote con diferentes e-mails, aunque sean inventados). De aquí a la ciudad se tarda una media hora a lo más (¡ojo! Este no es el Aeropuerto Frankfurt-Hann al que vuelan las aerolineas low cost y que está donde Cristo perdió el mechero).
Si tuviera que elegir un aeropuerto para vivir lo mismo me quedaba en este. He dicho.


