De las mejores hamburguesas que hemos comido.
Sabiamos que era un sitio muy pequeño. Fuimos sin reserva pero tuvimos suerte en una minimesa al lado de la puerta.
La mitad del local lo ocupa la plancha y la barra. Vas viendo como van haciendo las hamburguesas.
El camarero cercano y muy atento. Nos dio todas las explicaciones de la carta. Tenían 4 o 5 hamburguesas fijas en la carta pero el camarero nos comentó unas cuantas mas que van variando según la temporada.
Con carta de cervezas artesanales españolas. Probamos unas cuantas y buenisimas. Además el camarero supo guiarnos que cerveza pedir.
La hamburguesa tiene diferentes tipos de carnes, con dos tipos de pan casero (de trigo y centeno) y luego rellenos distintos a lo que te sueles encontrar.