Amsterdam

Como viajabamos en camper y Amsterdamm no es un sitio seguro para dejar el coche en la calle, decidimos hacear noche en un camping a las afueras de Amsterdam, en el mismo camping alquilan bicicletas, y aunque hay que atravesar una zona en ferri para llegar al centro, éste es gratis (bien!); por lo que es muy fácil moverse y salir al centro a visitar el día entero (solo hay que ver la hora del último Ferry ).
Las calles, los canales, las bicicletas, edificios del siglo XVI los coffe shops y el barrio rojo, en fín , Amsterdan, una ciudad de contrastes , dónde los turístas descubren libertades que los demás no gozamos, una ciudad cívica, con una gran oferta restaurantes, garitos de marcha, sus mercados callejeros de flores, parques, plazas, tiendas...

Mientras escribo estas líneas trato de recordar a grandes rasgos cuales fueron las mejores experiencias que me he traído de mis dos visitas a la capital holandesa, y la verdad sea dicha, cuesta un poco.
No porque la ciudad no me gustase, ya que Amsterdam es un lugar que te cautiva, con un ritmo pausado y absorbente, pero múltiples altos en el camino en la ciudad donde las cafeterías con menos demanda de 'capuccinos' del mundo tienen un aroma tan especial, hacen pupa en la memoria de un servidor.

Inevitablemente, vienen a la cabeza muchas bicicletas, cientos de ellas, por todas partes, tantas que la duda de 'me aparto yo o se apartan ellos' es una constante en tu camino. Si durante tu visita no acompaña el buen tiempo para hacer uso de ellas, el tranvía es una opción excelente para ir descubriendo la ciudad y los núcleos urbanos de los alrededores. La línea de tranvía llega a atravesar más de mil quinientos puentes, algunos de ellos realmente impresionantes, donde puedes contemplar los canales que atraviesan el corazón de la ciudad y comprobar de primera mano porque es conocida como la 'Venecia del Norte'

La oferta cultural es muy amplia, existen más de cincuenta museos de todo tipo, precio y condición, siendo los más conocidos el Rijksmuseum (Museo Nacional), el Van Gogh Museum y la casa escondite de Anna Frank, lugar donde se gestó su famoso diario.

Pasear, callejear, perderse por Amsterdam cámara en mano es uno de los mayores placeres que uno puede tener, es un ir y venir de bicicletas constantemente y sin parar, tienen preferencia frente a todos los vehículos ( o así lo parece) ¡¡¡ cuidado peatones al parar para hacer fotos!!! es fácil ser atropellado por una de ellas si no andas con cuidado... un sinfín de embarcaciones que pasean por los canales como quien va a dar un paseo por la calle de su ciudad y como no, contemplar los famosos barcos que utilizan como casas atracados en los laterales de los canales.

En esta imagen tuve la oportunidad de plasmar todas estas cosas en una única fotografía; canales, bicis, embarcaciones y casas barcos.