Sebastian Muñoz
Un delicioso desayuno en el centro de Viena.
La panadería “Anker Bäkerei” es una de las más antiguas e importantes de toda Austria.
La primera sucursal abrió sus puertas en Viena en el año de 1891 y al día de hoy cuenta con más de cien establecimientos a lo largo y ancho del país.
La historia del lugar comienza con dos hermanos judíos (Henrich Mendl y Fritz Mendl) que crearon la “Fábrica de pan vienés de Heinrich y Fritz Mendl”.
Durante sus inicios, todos los ingredientes eran traídos en carruajes a caballo todas las mañanas hasta la fábrica en el centro de la ciudad. El primer logotipo de la compañía fue una ancla roja dentro de un círculo blanco (en idioma alemán, “Anker” significa “ancla”).
Hoy en día, las sucursales de “Anker Bäkerei” son sin duda alguna sitios ideales para desayunar en la capital austríaca. A pesar de su enorme éxito y expansión nacional, el sitio sigue conservando la calidad original y todos los panes están deliciosos, especialmente acompañándolos con un café.
El sitio es un poco más barato que el promedio de los cafés en el centro de la ciudad. Por unos cuatro euros puedes pedir un bocadillo, un pan dulce y un café para empezar de la mejor manera tu recorrido por Viena.
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