Lo que sorprende, cuando visitas...
Lo que sorprende, cuando visitas Tesalónica, es que en el corazón de la ciudad, en varios lugares, hay un gran hueco, del tamaño de una manzana, que contiene una ruina romana o griega. Según la época, Grecia fue romana o helénica. Entre los romanos, el emperador Galerius por ejemplo, dejó a la ciudad varios palacios y su arco triunfal de la calle Gounari.
La antigua agora, el mercado romano, no es una excepción. Se usó desde el III siglo antes de Cristo, y es de esta época que son los objetos que se han encontrado ahí al excavar.
El sector sureste es el más interesante, estaba un poco fuera del centro neurálgico de la antigua agora, y se encuentran los baños romanos, con dos cuartos, uno redondo que era el sauna, el cuarto caliente para sudar, y otro rectangular, con dos plantas, para lavarse, habían dos piscinas, una caliente y una fría, todo eso calentado por un fuego debajo de la construcción.