Ascensor de Rivera Brava

Solo hay dos vías de acceso a Rivera Brava: por mar o por ascensor de la muerte. Esta segunda opción es la que tomé yo y, desde luego, fue toda una aventurilla. Aunque a primera vista no inspira precisamente confianza, este ascensor es la forma más común de llegar hasta este bonito enclave de Madeira, ya sea para darse un baño en el Atántico o para ir a tomar algo al restaurante Faja dos Padres.

Podrás subir y bajar en el ascensor de Rivera Brava de 11:00 horas a 18:00 por el precio de 7,50 euros. Durante el viaje disfrutarás de una vista marítima impresionante aunque quizá no del gusto de gente con vertigo.

La primera sensación que tuve al entrar en este ascensor es que una renovación no le vendría mal. Y es que ya son más de 30 años los que lleva dando acceso a Faja de Padres desde el mirador, siendo la única opción junto al traslado vía marítima.

En si, es una experiencia el poder descender pegado a un acantilado complemente vertical de la abrupta costa de la isla de Madeira, todo ello mientras se observa una gran panorámica de la costa ya que el ascensor lo permite a través de su cristal (algo sucio)

¿Repetiría? Si, porque el lugar al que accedes es uno de esos pequeños rincones