En el mismo solar que ocupa el actual...
En el mismo solar que ocupa el actual ayuntamiento de Lucena existió un anterior edificio, destinado a la misma función administrativa, atribuido a Andrés de Vandelvira. Repitiendo esquemas habituales en este arquitecto tenía planta rectangular con patio central abierto, al estilo de las casas-palacios barrocas. La ornamentación se concentraba en la fachada pero a diferencia de los palacetes que lo hacían directamente en la entrada el antiguo ayuntamiento de Lucena tenía una fachada totalmente abierta, con dos galerías de arcos sobre estilizadas columnas. La única concesión al gusto de la época fue la colocación sobre el dintel de un Hércules, motivo típico de Vandelvira.
A inicios del siglo XVII se crea un nuevo ayuntamiento, mucho menos vistoso. La obra fue necesaria ante la demolición del palacio de Hernán Delgadillo en 1618, lo que creó un amplio espacio abierto entre el consistorio y la parroquia de San Mateo.
En 1928, en plena época de furor historicista, se levantó la torre del reloj. Es de estilo italianizante y es, curiosamente, más alta que el campanario del templo más importante de Lucena, de la catedral de la Subbética.
En los años ochenta Manuel Roldán creó el nuevo ayuntamiento, recuperando las formas clásicas pero desde un punto de vista modernista. El ayuntamiento actual tiene dos galerías simétricas de arcos apuntados, la superior acristalada, la inferior formando unos soportales. El conjunto combina muy bien con la torre y luce un espectacular color blanco muy llamativo.
Nosotros entramos en el ayuntamiento desde fuera de la plaza, por donde se accede al aparcamiento subterráneo que hay debajo de la plaza. Desde dicho lugar el edificio, a pesar de sus estilizados contrafuertes, no nos gustó, es demasiado liso, demasiado soso. Su fachada a la Plaza Nueva es otra cosa, tiene sabor a plaza mayor medieval pero en plan historicista, a lo moderno.


