Barrio de Triana

El domingo siguiente al jueves del Corpus, se celebra en mi barrio el Corpus Chico, como popularmente se le llama, para distinguirlo del de Sevilla. La procesión sale de la Real Parroquia de Señora Santa Ana, una bellísima iglesia de estilo gótico mudéjar, de casi 750 años.
La Custodia de Triana es obra de Andrés Ossorio, realizada en 1712 en plata repujada.
Muestro algunas fotos de los altares y balcones que adornan las calles, obra de vecinos del barrio, que no quieren se termine esta tradición, en la que intervienen hasta los niños. El Ayuntamiento celebra un concurso, premiando a los que considera mas artísticos.

Callejear por el popular barrio de Triana es una oportunidad única para sentir el ambiente y la vida cotidiana de los trianeros. Observar a sus gentes, los corrales de vecinos, las academias de baile, los talleres de alfarería y sus edificios más emblemáticos es una maravilla.

Sus principales puntos de interés son El puente de Isabel II, más conocido como Puente de Triana, la Plaza del Altozano, La Calle Betis, famosa por los locales de tapeo y desde la cual se aprecia una maravillosa vista de Sevilla, la Capilla de los Marineros y un precioso Mercado de Abastos.

El trayecto a través de La Cartuja nos dejó en el inicio del Barrio de Triana, uno de los más emblemáticos y conocidos de Sevilla. Probablemente lo más popular del barrio es el puente de ISabel II, o simplemente puente de Triana, que tiene ya más de 150 años. En torno al puente, las dos riberas del Rio Guadalquivir se extienden con terrazas a un lado y extensos paseos al otro. En esta zona del río se concentran un gran número de actividades deportivas, donde piragüas y canoas se cruzan con barcas de pedales y barcos turisticos que recorren el río mostrando la ciudad y los monumentos que se pueden

Triana es uno de los barrios más conocidos de España. Cuna del flamenco, es también el barrio de los marineros de Sevilla. Sevilla se encuentra al otro lado del Guadalquivir, de ahí el título de la experiencia, y el conocido puente de Isabel II actúa como nexo de comunicación entre una y otra.

Además de ricas en historia, las calles de Triana están repletas de bares, cafeterías y restaurantes. Hay tantos y son todos tan buenos que es un ejercicio difícil elegir uno pero puestos a elegir yo me quedaría con la Blanca Paloma.

Típico bar de Triana, merece la pena visitar. Pedir solomillo al ajo y chacinas de lomo, jamón y queso. Un poco caro pero merece la pena ver el local .

Podría escribir mucho sobre Sevilla, y he escrito ya bastante para decir que tiene un color especial. Pero es que, indudablemente, Los del Río hicieron esa ya mítica canción pensando en el Barrio de Triana. Y es que si realmente se quiere pillar el truco a Sevilla hay que ir a Triana. Se come bien y barato, se respira flamenco y cultura… Es el lugar donde ir para entender Sevilla.

Dice la copla por soleá que tanto se cantaba en La Cava de Triana, que era el barrio donde vivían los gitanos hasta que los mezclaron por la ciudad y muchos se fueron a las Tres mil viviendas. Barrio que conserva ese espíritu melancólico y donde en cualquier rincón podemos disfrutar de las famosas tapas sevillanas.

No te cansas de pasear por sus calles. En pocas palabras: impresionante.

... su puente, su calle Castilla, la O y la Esperanza, un paseo por calle betis, casa cuesta, las golondrinas, la hdad. Del Rocio, el Cachorro, la capillera del Carmen, su Velá, la iglesia de Santana,

Trabajo allí, pero demasiadas fiestas por todo. Cada vez que hay alguna fiesta lo cortan todo. Es un poco desesperante para el que trabaje por aquella zona.

Este barrio es de Sevilla y no se puede aguantar el arte y la gracia que le rebosa por los cuatro costados.