Basílica de Santa Maria

Llegues por donde llegues a Castelló d'Empúries, no podrás evitar ver la silueta de la Basílica de Santa María que domina el pueblo.
Su construcción data de los siglos XIII y XV, y durante toda su historia persiguió el status de catedral con el apoyo de los condes d'Empúries, pero nunca se le concedió este status y tuvo que conformarse con el rango de basílica. Santa María es una mezcla de elementos románicos, el campanario, con elementos góticos, la nave central y los sarcófagos de los condes.
Uno no puede irse de la basílica si echar un vistazo a la puerta principal o a las gárgolas de

No es una catedral, pero casi. De hecho, esta basílica es absolutamente imponente. Sobre todo si, como nosotros, llegas justo al atardecer, con el sol naranja reflejándose en su fachada.
Se empezó a construir en el siglo XIII y es uno de los mejores ejemplos del gótico catalán. Se encuentra metido en la zona histórica de Castelló d’Empuries, una localidad que tiene, digamos, dos centros: El urbano, donde está la Basílica; y el de la playa.