Alberto Sifuentes Giraldo
Aunque esta iglesia está un poco retirada del centro, se llega bastante bien caminando y vale realmente la pena visitarla
Aunque esta iglesia está un poco retirada del centro, se llega bastante bien caminando y vale realmente la pena visitarla. Desde la elegante arquitectura neoclásica de su fachada y torres, hasta las enormes e imponentes esculturas que decoran su interior, todo en un estilo bastante equilibrado, con espacios muy diáfanos, logrando transmitir ese sentido de magnificencia que asociamos a la divinidad.