De lo mejorcito en hoteles rurales
Este hotel hecho en una antigua rectoria que data del siglo XII y con la iglesia de Sant Miquel de Pineda justo al lado que gracias a la amabilidad de la dueña del hotel pudimos ver por dentro.
El lugar fue reformado hace poco ya que estaba completamente en ruinas y dejaron el lugar un hotel de lujo con un ambiente super agradable y muy bonito.
Las 7 habitaciones de las que dispone son distintas entre si con unos diseños modernos pero que respetan el ambiente rústico del que dispone todo el hotel.
La cocina y la comida del hotel fueron excelentes al unir una gastronomía típica Catalana y toques de cocina Escocesa ya que el cocinero es escocés. Toda la comida estaba increíble con unos platos muy originales y poco habituales que estaban para chuparse los dedos y todo con productos de Km 0 originarios de esta zona.