Mi recuerdo vasco
Para los amantes de la naturaleza y el buen comer, recomiendo encarecidamente este maravilloso rincón del país vasco. Hace algunos años que estuve allí y decidí hacer una escapada durante mis vacaciones en Bilbao.
No tiene complicación alguna; saliendo de Bilbao se coge la carretera por la montaña en dirección a Bermeo, vamos subiendo y vamos viendo a derecha e izquierda de la carretera (que es algo estrecha y con curvas), que estamos rodeados de un frondoso y verde bosque en el cual nos podemos parar a coger las famosas endrinas (ingredientes básicos del pacharán) la sensación es aire puro y naturaleza por doquier.
El establecimiento en sí no es caro, en relación calidad - precio. Regentado por una familia, hay que destacar un ambiente super acogedor, así como el servicio, y la encantadora amabilidad de la dueña que te atiende personalmente. Y porsupuesto EL PACHARAN que lo hacen ellos. A mí me regalaron una botella. Y hasta pude ver un Aurresku.
Magnífico y para disfrutarlo
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