Cala Sa Calobra

La carretera que recorre la Costa Tramontana de Mallorca es una de las más fascinantes de España. A lo largo de sus 90 kilómetros uno se entrega completamente al accidentado paisaje: Rocas en las alturas, bancales con vides y rojizos pinares en las laderas, espectaculares desfiladeros cuando la carretera se acerca al mar, y naranjos, limones, higueras, cactus y enormes palmeras cuando baja a algún valle.

Entre Lluc, hito en la ‘Serra’, ya que en su Monasterio se halla ‘La Moreneta’, la virgen negra patrona de Mallorca, y Sóller, se encuentra el empinado acceso a la famosa cala de Sa Calobra.

Desde que pasas el Túnel de Soller y tomas la carretera Ma 2141, notas como algo diferente está por venir. El navegador dice que queda 29 km para llegar a Sa Calobra y te sorprende que en tiempo figure 59 minutos. Ese misterio se va desvelando en el discurrir de los km y al enlazar una curva tras otra.

La belleza del paisaje y los contrastes entre los valles de la Tramontana hacen que ese tiempo pase muy rápido. El paso de los vehículos se ve alterado de cuando en cuando, por el paso de algún rebaño de ovejas o alguna cabra suelta, que en plena libertad pastan sin importarle el paso de nuestros coches.

Sa Calobra es una minipoblación situada en la costa norte de la isla de Palma de Mallorca. Son literalmente cuatro casas situadas junto a una cala idílica.
A unos 500m caminando por un camino hormigonado llegamos al Torrent de Parlós, que forma una pequeñísima calita chulísima a la que se accede por un túnel escavado en la roca de los acantilados.

La visita merece muho la pena, pero lamentablemente hay un exceso de turistas que provocan que lo que podría ser un día fabuloso acabe siendo una ruina porque no se tiene espacio para dejar la toalla o porque vas chocando con todo el mundo.

Sin duda uno de los mejores rincones que he visitado en esta preciosa isla.
El acceso puede llegar a ser complicado para conductores con poca experiencia ya que la carretera es angosta y plagada de curvas. Aunque merece la pena con creces!
Ofrece varias comodidades como un parking de pago a 5 minutos a pie de las calas, máquinas de vending con refrescos, restaurantes, duchas (de pago 1€/4min.) .

Además puedes ver una cala de rocas con un pequeño embarcadero con unas vistas preciosas y el conocido Torrent de Pareis el cual crea un paisaje de ensueño. Se accede por un túnel de piedra (reformado e iluminado) que desemboca en una playa de pequeñas piedras un tanto incómodas pero que olvidas en cuanto miras a tu alrededor.

Una cala a la que puedes acceder tan solo por mar hace del lugar un enclave paradisíaco dentro de nuestras fronteras. A la cala llega el Torrent de Pardos, con unas imágenes preciosas incluso cuando no lleva agua.

Pasamos allá un día maravilloso haciendo prácticas de navegación, los peces de colores nadaban a nuestro alrededor dando una imagen acuatica impresionante.

Una anécdota, al partir y sacar el ancla nos llevamos un barco francés que también estaba fondeado en la cala, enganchamos su ancla y su trabajo nos costó desengacharnos!.

La situación en google maps es