Espejismo
Sin duda la caldera de Askja es uno de los lugares más espectaculares que he visitado en mi vida. Es una pena que hiciera un día tan malo, y las fotos no reflejen lo que es aquello.
Llegar no es nada fácil. Cuando coges el desvío desde la carretera 1, y aparece una señal de próxima gasolinera a 280 km, ya te da yuyu. La pista está en muy mal estado, y son 110 km de esa carretera hasta llegar a Askja. Es imprescindible todoterreno, aparte de la carretera mala hay que vadear ríos. Pero vamos, por muy mal que os lo ponga, vale la pena el palizón de coche.
Una vez llegado al parking de Askja, hay que andar 2,5 km por un paraje desértico, en el que parece que vuelves a la época del blanco y negro en la tele; son los únicos colores que divisas en todo el camino. El blanco de la nieve y el negro de las cenizas.