Un paseo para repetir aunque haga frío!!!
Esta calle que recorre el centro más antiguo e histórico de la ciudad, nos sorprende con su calle empedrada y angosta que resiste el paso del tiempo, de los años y de la gente, la que originariamente fuese denominada como cake Mayor, posteriormente
De San Martín, más adelante allá por 1808 Liniers, posteriormente Reconquista luego de la recuperación de las invasiones inglesas más adelante y como homenaje a quienes defendieron la incipiente patria con tesón y sacrificio obtuvo el nombre que hoy ostenta en el año 1849. Se repararon y valorizaron las casas y comercios, aún quedan algunos anticuarios por la zona, y en su recorrido encontramos el ex edificio del Banco Hipotecario, el de una compañía de teléfonos, la Plazoleta de San Francisco y el famoso templo y Basílica de San Francisco y Parroquia de San Roque entre otras antiguas maravillas. Hacía un frío tremendo, y en la calle se arremolinaban visitantes de otros lugares, los lugareños que habitan la zona el “Paseo del Anticuario”, antiguas farolas y bellísimos balcones de hierro de antaño.
Las tiendas que sacaron los percheros con prendas a la calle, fotos en blanco y negro enmarcadas en blanco sujetas a unas rejas para elegir y comprar, mesitas y muestrarios con bisutería de todo tipo, pañuelos, turbantes y piezas de madera trabajadas artesanalmente. El famoso juguete conocido como “Caleidoscopio” inventado en 1816 por el físico escocés.
Magia con barajas David Brewster. Ponchos, boleadoras, aperos y todo tipo de piezas gauchescas argentinas. Un puesto donde se exhibían sifones de colores que estaban pintados pero tan sólo se vendían los originales antiguos. Revistas, vinilos y libros antiguos y el tradicional cafetero que también vendía mate, y en enrejado del que colgaban adornos y placas de fileteado a la antigua.
