Roberto Zaera Fernández
Simplemente encantador.
Simplemente encantador.
Desde que pasas por la puerta, te trasladas a un lugar maravilloso, tanto por el jardín impecable, con unas plantas, flores y árboles exuberantes, como por la casa tan magnifica que han creado con tanta ilusión María Jesús y Marcelo, una pareja encantadora que te transmiten su ilusión por tantas cosas especiales de la zona y su entorno, la lastima es no disponer de un mes entero para poder verlo todo.
Tenemos que recalcar la limpieza, el estado impecable de las habitaciones, los desayunos deliciosos y la calidez de los dueños, que te hacen sentir como en casa.
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