Una Casa-Palacio manchega del Siglo XVII en la que las instalaciones y el trato de los propietarios y todo el personal te hacen sentir mejor que en tu propia casa.
Con Categoría Oficial de Tres Espigas y certificada con "Q" de Calidad.
Primero de todo, el trato y la cordialidad de Miguel y Paloma, propietarios, han sido muy cordiales y atentos.
La habitación espaciosa y bonita, muy cómoda y limpia .Tanto los sofás como la cama, súper cómodos.
Desayuno casero y muy bueno. (Deliciosas mermelada).
Será nuestra residencia habitual, en todas nuestras visitas a San Clemente y alrededores.
Muy agradecidos.
Un hotel rural de esos en los que merece la pena todo. La propia casa, muy bien restaurada por los dueños. Las habitaciones, y estancias llenas de encanto. Y la cocina simplemente extraordinaria. Todo absolutamente exquisito.
