Casa-café La loma

La Loma es un restaurante que seguro que te hace volver. Conviene hacer la reserva con tiempo, sobre todo en verano, pues se llena de gente del lugar que quiere un lugar tranquilo donde cenar y con muy buena calidad en el menú. Es asequible, porque los productos son muy buenos y merece la pena, pero sobre todo, si tienes la oportunidad y vais un grupo pedid que os pongan en las terracitas naturales que dan a la playa. Si hay luna llena no dejarás de mirar en esa dirección.

Veo que no aceptan niños. No se si aceptarán a la gente en función de orientación sexual, raza o religión. Es ilegal rechazar el acceso a niños además de muy poco ético. No entiendo como dicen que es un lugar sostenible, de naturaleza.. queriendo negar la entrada a personas según les conviene.

El marco es espectacular de verdad, aunque confieso que con respecto al P.N de cabo de gata no soy imparcial, no puedo serlo. Se trata de un cortijo rehabilitado que solo abre en verano, así que, se hace esperar. Desde aquí, podrás ver al sol esconderse entre las montañas, brillar la luna sobre el mar y ver las siluetas de las Pitas en el horizonte. Si me pierdo buscame aquí: Me encontrarás viendo la puesta de sol desde alguna de sus terrazas, tomándome algo y escuchando buena música.

Las vistas muy bien. El sitio es normalito y la comida bien sin más. Me sorprendió el solomillo pero poco más. En fin, que la vista es lo único recomendable