Castillo de Bratislava

La reconstrucción ha sido total. Como el ave fénix que renace de sus cenizas, o sin entrar en la mitología, como un Alcazar de Toledo en tierras eslovacas, el castillo de Bratislava se erige a 150 metros de altura, sobre una colina, con unas vistas impresionantes de la ciudad. Por poco que nos fijemos se ve perfectamente el contraste entre la parte antigua y la parte moderna de la capital. Del castillo sin embargo, no. Fue reconstruido completamente como podemos ver en el pequeño museo que sobre él se encuentra en una de sus dos únicas salas visitables. En la otra encontramos los restos de la primitiva fortificación y las recuperaciones arqueológicas que se produjeron durante el proceso. El edificio, actualmente es sede de la administración pública.

El Castillo de Bratislava se encuentra en la parte más alta de la ciudad, justo sobre el peñón que la corona. Se puede ver prácticamente desde cualquier punto de la ciudad. Se accede a él subiendo por una ladera muy cerca del punte del UFO o ascendiendo por las pequeñas callejuelas de suelos empedrados que parecen no tener fin. Esta última es la mejor opción, ya que mientras se sube se pueden ver las típicas casas y, a la vez, la ciudad cada vez más abajo. Se levantó en el siglo XV, pero fue destruido en el XIX, y poco a poco fue reconstruyéndose. En él es donde se coronaba a los reyes húngaros. Actualmente alberga el Museo Nacional Eslovaco.

El castillo tiene un lugar destacado sobre la ciudad. Aunque seguramente las vistas sean mejores del el puente Nóvy, las del castillo tampoco son nada malas ya que según desde donde mires puedes ver tanto la parte vieja como la más moderna de la ciudad.

Actualmente, el castillo es como una "mentira". El original fue destruido quedando casi totalmente en ruinas y el que ahora es un símbolo de Bratislava fue construido hace apenas 50 años, aunque por los alrededores hay algunos restos. Santa Isabel de Hungría, una princesa muy querida, vivió ahí.

Actualmente, el castillo es el museo nacional eslovaco, pero no pude entrar, cerrado por obras para variar.

El castillo es uno de los puntos que resaltan más en el skyline de Bratislava (será porqué esta en la colina) llegar a pie hasta éste no es muy cansado, aunque es más recomendable hacerlo por el camino que no tiene escaleras.
Ahí puedes encontrar una mezcla de estilos, con algunos restos góticos.
Desde lo alto de la colina podrás disfrutar también de unas interesantes vistas de la ciudad.

El castillo de Bratislava esta encima de una colina, para acceder a el hay que pasar por unas puertas, que cierran a determinadas horas y ya no se permite el acceso a la colina.
Las verjas son de hierro forjado con los símbolos del castillo en ambas puertas, aunque tienen mas pinta de ser nuevas que de ser las originales o estas restauradas.

Se sitúa en el centro histórico de la ciudad. Hay que subir una cuesta bastante pintoresca donde llegaremos a las murallas del castillo. Dentro está el Museo Nacional Eslovaco. Como esta en una colina tiene una vistas maravillosas de la ciudad y del río Danubio. Lo emblemático de este Castillo son sus 4 torres que se ven desde cualquier sitio.