El castillo negro japonés.
Confieso que cuando organizamos nuestro viaje a Japón no estaba en nuestro planes visitar Matsumoto. Por supuesto queríamos visitar uno de esos castillos japoneses sobre los que habíamos leído. Y la primera idea era ir a Himeji, el castillo blanco. Tuvimos la mala suerte de que estuviera en obras, así que tuvimos que buscar otra opción. Y ésta fue el castillo de Matsumoto, es castillo negro también conocido como castillo del cuervo. Uno de los cuatro grandes castillo de Japón no reconstruidos.
Una vez en Matsumoto y tras pagar la entrada para acceder al recinto de este castillo que está rodeado por un foso, pudimos ver el impresionante edificio. Es uno de los castillos más singulares de Japón debido a su estructura en la que no solo hay una torre o edificio principal. En este caso, junto a éste y conectadas por pasillos cubiertos, se pueden ver tras tres torres menores en una de las cuales se encuentra la sala para la contemplación de la luna.
