imponente
La Catedral de Evreux es una de las poquitas joyas de esta ciudad de Normandía. Restaurada en el siglo XIX, el edificio original remonta al siglo XII. Renovada hace poco, la pulcritud del edificio desde el exterior esconde dos curiosidades al interior: primero un órgano ultra moderno, cuyo aspecto contemporáneo contrasta con la arquitectura romana y gótica del lugar. Y una pintura renacentista de toda belleza, escondida hasta en una de las capillas del fondo de la catedral.