Cementerio de Chauchilla

Chauchilla fue uno de tantos cementerios de las culturas preincaicas, que fue saqueado por los profanadores de tumbas (huaqueros), que robaban todos los tesoros cerámicos, metálicos y algunos textiles, que acompañaban a los difuntos, dejando al capricho del desierto las momias.

Hasta 1997, que el Instituto Nacional de Cultura (INC) de Perú, se hizo cargo protegiéndolo y convirtiéndolo en un sitio arqueológico oficial.

"Chauchilla es el único lugar arqueológico de Perú en el que se pueden apreciar momias a cielo abierto, en tumbas reales....Y representa un espacio en proceso de excavación y
estudio permanente."

Podrás encontrarlo unos 28 km al sureste de la ciudad de Nazca. Se accede por la Panamericana Sur, tomando el desvío transitable a la izquierda, a unos 20 km de la ciudad (Km 464,20). Otros 8 km de camino pedregoso y llegaremos al sitio. Está bien indicado y cualquiera en la ciudad te puede ayudar.

A 30 Km de la ciudad de Nazca, en Ica, Perú. Toda una necrópolis pre inca, de la cultura Ica-Chincha. Una antigua necrópolis saqueada, por profanadores de tumbas los cuales despojaron a los cadáveres de sus pertenencias.

Lo que más llamo nuestra atención fue el cementerio de las momias y la verdad, en un buen estado de conservación, sorprendente, debido al clima tan seco por el desierto de Nazca.

Tumbas con momias originales, en un yacimiento al aire libre ¡A pesar de los tesoros saqueados, expoliados (vasijas de cerámica, tejidos, objetos en oro y plata) etc
También se pueden ver tumbas de adobe con cadáveres, con cráneos con suturas sagitales y dentadura blanquísimas, largas melenas o trenzas y alguna vasija que impresionan, la verdad. Dada la contemplación visual tan espantosa de aquellos seres de Nazca.

A 25km de Nasca se encuentra una amplia extensión de territorio absolutamente árida y reseca, compuesta de arenas y piedras, debajo de las cuales se encuentra la huaca del cementerio de Chauchilla de la cultura Nasca. A primer golpe de vista nada rompe la monotonía del desierto, aparte de unas estructuras de palos y cañas, a modo de toldos. Éstas sirven para proteger las momias de los antiguos nasca, del inclemente sol de estos parajes. Dicha cultura enterraba a sus muertos en agujeros hechos en la arena, recubiertos con ladrillos de adobe y recubiertos con techos de cañas. Los difuntos eran sepultados con el ajuar que se suponía utilizarían durante su viaje al más allá. Los restos encontrados en las tumbas representan el nivel social de los individuos, ya que a más rango social, las pertenencias con las que eran enterrados eran superiores. Estas no consistían principalmente en oro o elementos suntuarios, si no en elementos cerámicos y de uso cuotidiano.