La chocolatería más castiza
La Chocolatería San Ginés es un sitio con encanto. En realidad, parte de él, se debe a la decoración y el mobiliario antiguos: el mostrador, el reloj de pared y las mesas de mármol no pasarán desapercibidos a los amantes de las antigüedades, pero su enorme popularidad se debe a su famosísimo chocolate con churros: bien espeso y servido en tazas blancas tradicionales por camareros "de los de toda la vida". Los churros y las porras están sencillamente “de muerte" y aún en invierno instalan en el pasadizo una terracita magnífica, que calientan a golpe de estufas de ésas que parecen una farola y que dan un calor increíble.