La chocolatería más castiza
La Chocolatería San Ginés es un sitio con encanto. En realidad, parte de él, se debe a la decoración y el mobiliario antiguos: el mostrador, el reloj de pared y las mesas de mármol no pasarán desapercibidos a los amantes de las antigüedades, pero su enorme popularidad se debe a su famosísimo chocolate con churros: bien espeso y servido en tazas blancas tradicionales por camareros "de los de toda la vida". Los churros y las porras están sencillamente “de muerte" y aún en invierno instalan en el pasadizo una terracita magnífica, que calientan a golpe de estufas de ésas que parecen una farola y que dan un calor increíble.
El público de San Ginés es de lo más variopinto. Lástima que casi siempre esté masificada, sobre todo durante los fines de semana, cuando guiris con cara de sorpresa copan la terraza y el local.
¿El precio? Razonable: una ración de chocolate con churros cuesta 3.50 euros. Buena relación calidad/precio.
En definitiva, un lugar magnífico para acabar una noche de juerga entre amigos, o para invitar a los niños a merendar.
