Pablo Ali
Pasaba por esa esquina sin siquiera...
Pasaba por esa esquina sin siquiera pensar en comer cuando mis pies siguieron caminando pero mis ojos no podían dejar de mirar todos esos colores y texturas que hacían agua mi boca, cuando reaccioné pude detener mis piernas antes de que mi cuello se terminara de enroscar. No pude dejar de pedir un pastel y un café para comprobar que sabía al igual que se veía.