Conjunto histórico de Combarro

A seis kilómetros de Pontevedra, Combarro, es uno de los pueblos más bonitos de las Rías Baixas, no en vano fue nombrado en 1972 conjunto histórico, artístico y pintoresco, o sea que en este año de 2012 cumplen cuarenta años con tan rimbombante nombre, más que merecidos por sus hórreos al borde del mar, los cruceros de piedra que jalonan el pueblo, las casas mariñeiras al borde del mar, hoy casi todas restaurantes, e iglesias tan bonitas como la de parroquial de San Roque, hoy patrono del pueblo.

Construido directamente sobre granito, Combarro mantiene la esencia de la arquitectura popular

Precioso pueblo de pescadores que ha sabido conservar, en su casco antiguo, esa arquitectura típica y tradicional gallega que refleja en sus calles una forma de ser y vivir.
Espero que las imágenes (perdón si quizá son muchas) reflejen nuestra opinión.
Saludos.

Hace unos meses disfruté de una pequeña escapada por las Rías Baixas. Entre las recomendaciones que encontré estaba la visita a Combarro.
En mi opinión es un pueblo que no debemos dejar de visitar, tiene un espectacular encanto marinero muy cuidado. Su playa, sus horreos a la orilla, sus calles estrechas invitan a callejear, en cada calle a descubrir algo nuevo.

Un lugar encantador, un pueblo marinero, restaurado en su mayoría, en donde disfrutar de una buena comida, a la orilla del mar, obligada visita del viajero, que viene a Pontevedra

muchos hórreos, antiguos almacenes de patatas y maíz, muchos de ellos datan del siglo XVIII. y casas de cuento .

Hace tres años tuve la suerte de visitar este rincón tan vello de nuestra España, y digo España porque soy de Andalucía y al llegar a Galicia, note un cambian tan radical en el paisaje que pese que estaba en otro país extranjero,pero no estaba en mi tierra.
Una tierra sorprendente en todos los aspectos (gastronomía, gente, paisajes,belleza, ósea que lo tenemos casi todo), para mi fue un orgullo visitar este rincón tan bello de Galicia.

Es un pueblo marinero con un casco histórico de piedra.

Estuve en el 2002, y entonces era encantador, mucha menos gente entonces.

Espectacular, precioso y relax.

Pueblo pintoresco de calles estrechas y lleno de bares donde poder comer muy bien.