Con gusto por lo español
Aunque esta destileria se encuentra en la región de Pertshire, su acceso más recomendado es desde Stirling (a unos 15 minutos en coche, dirección Perth, en la aldea de Blackford).
Exteriormente, no es la más atractiva, pero todo cambia cuando entramos. Una cuidada tienda, con una impresionante variedad de todo tipo de productos en relación con la destileria, donde también se fabrica una cerveza de malta muy buena.
La visita también es excelente. Una cuidad narración de la historia de la fábrica y una meticulosa explicación sobre los procesos de fabricación del whisky y cerveza, ente bromas, amabilidad y un ambiente de lo más relajado. Al final la cata, no muy limitada como en otras destilerias, especialmente si nos hacemos amigos del guía de turno y le hacemos saber que somos españoles (y amantes de los escocés) ... es cuando empiezan a contarnos que sus primeros suministradores de barricas son los españoles, principalmente Jerez de la Frontera, pues tienen un whisky (maravilloso) envejecido en sherry de Jerez, y uno (que solo lo hacen ellos y es una pasada) envejecido en barricas de vino Moscatel.
