Ver amanecer desde la duna 45
Nos levantamos a las cinco de la mañana para llegar antes del amanecer a la duna 45, que se llama así porque se encuentra en el km. 45 de la carretera que se adentra en el Namib-Naukluft National Park, un lugar casi mágico, extraterrestre. Poco a poco los tonos grises se van transformando en un naranja intenso a medida que el sol ilumina las rojizas arenas de las dunas. Merece la pena el esfuerzo de subir por la cresta de la duna soportando el viento lateral que moldea el paisaje, un viento fresco todavía. El sol, todavía bajo en el horizonte, dibuja relieves en el paisaje que, en pocas horas, desaparecerán.