Carlitos,
Un lugar que se convirtió en clásico y un hombre en mito. Carlitos ofrece panqueques, hamburguesas y lomitos de una calidad y originalidad inigualable. Caracterizado por su ambiente hogareño de siempre se hizo famoso en las madrugadas post-boliche de Gesell y hoy siguen creciendo las sucursales en Buenos Aires.
En Carlitos se reinventó el concepto del panqueque, con cientas de variedades tanto dulces como salados, una masa cacera única (casi como la fórmula de la Coca-Cola) y de una gran abundancia, uno puede cenar tranquilamente un buen panqueque, ya que por la abundancia que lo caracteriza, no cualquiera puede terminarse una hamburguesa o un lomito y un panqueque por detrás.
Lamentablemente Carlitos falleció en 2010, pero en su local se respira ese ambiente medio familiar medio nocturno desestructurado, con las paredes llenas de platos dedicados a la gente que quería y respetaba. Particularmente tuve la suerte de verlo desde chico siempre laburando detrás de la barra y siempre dispuesto a saludar y darle un poco de afecto al que se acercaba. Otro detalle de sus locales es ese, que la cocina siempre está al frente completamente vidreado, que se puede ver desde la calle, señal de calidad.
Si se pasan unas vacaciones en Gesell, creo que es obligatorio pasar una noche por la 106 y Avenida 3, en frente de Dixit. Personalmente les recomiendo el 197: Dulde de leche, crema y banana o el Maradona que es similar, sin crema pero bañado en chocolate glaceado...


