El circo de la vida.
El baptisterio de San Giovanni, está situado detrás de la Iglesia de San Juan y tiene dos entradas: la oficial, una pequeña puerta junto a la Piazza y la otra, la que usarás si se celebra algún evento, un poco más abajo entrando por el Seminario Maggiore.
De planta octogonal, con unas columnas de mármol que a medida que ascienden, van cerrando el conjunto hasta rematar en una preciosa cúpula dedicada a San Juan Bautista (al que habíamos visto en la catedral). Una depresión circular en el centro, rodeada de una bellísima balaustrada de mármol, en la que los espectadores se apoyan, para ver, a semejanza del Circo Romano, al unico gladiador que micrófono en mano, se dirige a una mujer con un niñ@ en brazos. Se trata de un bautizo. Es fácil de adivinar, porque en el centro y ligeramente elevada del suelo, hay una preciosa, pila bautismal tallada en una única pieza de basalto verde. Unica.
