La estupa de los innumerables Budas Estupa
En el patio del complejo amurallado de Palkhor se encuentra una de las “joyas” de la arquitectura tibetana; el chorten (estupa) Kumbum.
Su construcción data del año 1414 y se trata de un edificio que presenta una estructura singular y única en la que nueve pisos ascienden de manera decreciente hasta alcanzar la parte superior del edificio que se encuentra coronada por una cúpula decorada con trece anillos dorados que simbolizan los estados sucesivos de acercamiento a Buda.
Cada uno de los pisos, de estructura circular, contiene un sinfín de pequeñas capillas en cuyo interior podremos contemplar cientos de representaciones, tanto escultóricas como pictóricas que muestran a Budas, Bodhisattvas, vajras, Reyes Dharma, Arhats, discípulos, grandes adeptos de diferentes órdenes en la historia del budismo tibetano y destacadas figuras de la historia tibetana, tales como Songtsen Gampo y Trisong Detsen.
En total hay alrededor de 3.000 estatuas, por lo que el sobrenombre con el que se conoce a este edificio, estupa de los innumerables budas, parece de lo más acertado.
Pinturas al fresco, estatuas, figurillas y thangkas ocupan todas y cada una de las capillas que horadan este fantástico edificio. Evidentemente es imposible admirar con el detenimiento que sin duda merecen cada una de estas salas pero, en función el tiempo (y las ganas) de que dispongáis os podéis dar sin duda un buen atracón de arte tibetano.
Los peregrinos recorren con paciencia y devoción cada una de las 108 capillas del Kumbum entonando sus cánticos y agitando sus ruedas de oración, nosotros, menos devotos y más terrenales, aceleramos el paso un tanto saturados por la profusión de imágenes y apremiados por la falta de tiempo….
Alcanzado el último nivel de este mándala tridimensional, podemos afirmar que hemos cumplido, a duras penas eso si, con la tradición de visitar todas y cada una de las capillas del Chorten y un tanto exhaustos y agobiados tras contemplar tanto buda demoniaco accedemos al exterior para recibir una bocanada de aire fresco y contemplar una hermosa vista del complejo monástico y de la población de Gyantse.
Para no perdérselo…..


