De los Pirineos a la Costa Brava en bici por las antiguas vías del tren
Cuando me invitaron a pasar unos días por la provincia de Girona de turismo activo, de las opciones que tenía, la que más me apetecía era la posibilidad de pasar tres días recorriendo Girona en bicicleta desde el Pirineo hasta la Costa Brava, recorrido que no hicimos completo porque teníamos otras actividades culturales y gastronómicas también muy apetecibles, pero la ruta que comenzamos en Olot y terminamos en Girona, pasando por lugares tan emblemáticos como el Vall d`en Bas, Sant Feliú de Pallerols, Amer, Anglès, Palamòs, Sant Feliu de Guixols y Quart, fue un caleidoscopio de la cultura gerundense, desde la montañesa con sus desayunos copiosos con butifarra y pan amb tomaquet, hasta la costera de los mercados de subasta del pescado, y palpamos de cerca su historia, la monumental plasmada en el Monasterio de Sant Feliu de Guixols, y la de los esforzados artesanos del barro y la cerámica en Quart.
Las vías verdes transcurren principalmente por antiguas vías de tren reconvertidas al ocio en bicicleta o senderismo, y por sus características están adaptadas a toda condición física. La primera etapa, llamada ruta del Carrilet 1, une las localidades de Olot y Girona, unos 57 km, aunque nosotros hicimos la mitad, entre Olot y Anglés, siguiendo la ruta del antiguo tren de vía estrecha y pasamos por la Zona Volcánica de la Garrotxa y Sant Feliu de Pallerols, una etapa preciosa bien señalizada con areas de descanso y picnic, en una de las cuales nos dimos una buena comida campestre.
El segundo día fue más tranquilo, ya que hicimos la ruta que une Palamós y Palafrugell, conocida como la Ruta del Tren Petit, de 6 km de longitud por la vía estrecha que conectaba Palamós con Girona pasando por La Bisbal d’Empordà, e hicimos también un ramal a la playa de Castell en Palamós, una de las mejor conservadas y protegidas de la Costa Brava, sin construcciones y muy salvaje.
El tercer día nos llevó a Girona, pero antes pasamos por la localidad de Llambilles, donde hay un curioso monumento ciclista hecho con materiales de desecho, y a la histórica localidad de Quart, donde visitamos su estupendo museo de la cerámica.
El recorrido total de las Vies Verdes en Girona, 125 kilómetros, se divide en cuatro tramos:
1.- Ruta del Hierro y del Carbón, que va de Ripoll a Ogassa cruzando Sant Joan de les Abadesses.
2.- Ruta del Carrilet I Olot-Girona que va de Olot a Girona por los pueblos de los valles de los ríos Ter, Brugent y Fluvià,
3.- Ruta del Carrilet II Girona-Sant Feliu de Guíxols que desde Girona atraviesa por la margen oriental la depresión de La Selva hasta Llagostera y sigue por el valle del Riudaura, hasta que llega al Mediterráneo en Sant Feliu de Guíxols, y muy cerca del mar
4.- Ruta del Tren Petit, que une las localidades de Palamós y Palafrugell.
Cualquiera de las rutas es más que recomendable, y la web de viesverdes.org nos da toda la información necesaria para planificar nuestro viaje. Si no disponemos de bicicletas propias, se pueden alquilar en cualquiera de las dos empresas que colaboraron para que nuestros tres días en bicicleta por Girona fueran inolvidables,'https://www.outdoor-emporda.com' y 'https://www.cicloturisme.com/'


