martin susel
Amigos, mientras uno camina a la...
Amigos, mientras uno camina a la tardecita, ya casi entrada la noche, por la hermosa peatonal porteña (con sus defectos y virtudes) puede mas allá de toparse con un sinfín de vendedores ambulantes que nos ofrecerán desde mates argentinos hasta remeras de Maradona incitándonos a realizarle un acto sexual que me imagino que para mas de uno, no es ninguna tentación, podemos deleitarnos observando estos espectáculos que tienen por entrada el valor de lo que cada uno quiera aportar. Va vídeo...