Kris por el mundo
Cerca del casco histórico
Plovdiv es una ciudad de una tamaño medio comparado con otras pequeñas localidades por las que pasamos en nuestro viaje a Bulgaria. Los hoteles en esta ciudad son más, pero también más modernos. No dudo que existan pequeños hoteles con encanto, pero no a un precio medio (para ese país).
Nosotros nos decantamos por el Expo Hotel gracias a una recomendación. Es un hotel funcional y sencillo, pero que cuenta a su favor con estar a corta distancia caminando del centro histórico de la ciudad.
Para aquellos viajeros que lleguen en coche a la ciudad tiene otra cosa buena: un parking gratuito junto al hotel. En realidad es una explanada de tierra, pero resulta perfecta para no romperse la cabeza buscando donde dejar el coche.
En cuanto a este hotel de Plovdiv tiene un puñado de habitaciones por planta. La nuestra daba a la avenida principal, pero estábamos en un piso alto por lo que apenas escuchábamos el ruido de la calle. La habitación tenía un tamaño correcto, una camas cómodas y una ducha con cortina (algo no tan normal en Bulgaria). Sin embargo el aislamiento lumínico no es bueno, y en cuanto amanece te da el sol en la cara, algo que a mi personalmente me molesta.
Por otro lado se ofrece desayuno en un pequeño comedor del sótano. No ofrece demasiados productos, pero si lo suficiente para comer un poquito de embutido, un café y alguna tostada.
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