Fernandoo
Haarlem se encuentra situada al oeste...
Haarlem se encuentra situada al oeste de Holanda, a unos 20 kilómetros de la ciudad de Amsterdam. En tren apenas se tardan unos 20 minutos y es bastante recomendable visitarla. Es una ciudad pequeña, digna de conocer a pie. Sus construcciones son de las típicas del país, con sus casitas bajas de ladrillo rodeando los numerosos canales. Desde la estación hasta la catedral, todo merece la pena. Es más bien una ciudad dormitorio, por su cercanía a Amsterdam, por l que entre semana suele ser muy tranquila y perfecta. Al no ser muy grande, se puede recorrer de un lado a otro, callejeando, en un día. Si hace buen tiempo, no está mal darse un paseo por los parquecitos que están al lado del cana, con las pequeñas barquitas.
Pero la ciudad también alberga una gran vida, ya que es un destino de estudiantes. La media de edad, gracias a esto, es muy joven, y por las noches hay bastante ambiente en los barecillos o coffe-shops de la ciudad.
Uno de los monumentos más famosos que hay es el molino de viento de Adrian y el puente antiguo de la ciudad.En cuanto a la comida, cualquiera de sus restaurantes típico, con sus decorados casi de película antigua, son buenos para comer y no son demasiado caros al estar fuera de lo que es Amsterdam y el bullicio del turismo. Los hoteles tampoco son demasiado caros si los comparas con Amsterdam, y no es una mala opción alojarse aquí si se va a visitar la capital, pues los 20 minutos en tren no se notan y la estación está cerca de casi todo.Esta última, la estación de trenes, situada al lado de la de autobuses, guarda su estilo clásico casi inalterado, con sus andenes de época bien cuidados, con sus bóvedas antiguas... Es bastante curiosa, pues contrasta lo clásico del andén con la modernidad de las cajas y la entrada.
Uno de los monumentos más famosos que hay es el molino de viento de Adrian y el puente antiguo de la ciudad.En cuanto a la comida, cualquiera de sus restaurantes típico, con sus decorados casi de película antigua, son buenos para comer y no son demasiado caros al estar fuera de lo que es Amsterdam y el bullicio del turismo. Los hoteles tampoco son demasiado caros si los comparas con Amsterdam, y no es una mala opción alojarse aquí si se va a visitar la capital, pues los 20 minutos en tren no se notan y la estación está cerca de casi todo.Esta última, la estación de trenes, situada al lado de la de autobuses, guarda su estilo clásico casi inalterado, con sus andenes de época bien cuidados, con sus bóvedas antiguas... Es bastante curiosa, pues contrasta lo clásico del andén con la modernidad de las cajas y la entrada.
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