Cuando hace 20 años aterricé por vez p...
Cuando hace 20 años aterricé por vez primra en Chicago, este restaurante de comida italiana (o mejor, italo-americana) estaba recién inaugurado y en la cresta de la ola. Veinte años después, pude comprobar que sigue gozando del favor del público. Se encuentra situado en Near North Side, casi al lado de Marina City en un histórico edificio de ladrillo rojo al que se han superpuesto llamativos neones y anuncios (digo llamativos, por no decir horteras).
El nombre de Harry caray no dirá nada al 99,99% de los españoles, pero en Chicago es una figura mítica. Este comentarista radiofónico y, más tarde, televisivo, se labró una gran fama restransmitiendo lo partidos de uno de los equipos de béisbol locales, los Chicago Cubs. Caray era todo un personaje y como comentarista de lo más peculiar: Se equivocaba constantemente y pronunciaba mal los nombres de los jugadores, pero era adorado por la afición. En consecuencia, el local está decorado con infinidad de recuerdos que acumuló durante su carrera, relacionados casi todos con el mundo del béisbol.
El local es muy grande y con un sabor añejo. La oferta gastronómica gira en torno a las pastas y las carnes y, como es habitual en USA, las porciones son más que generosas. La comida es buena y el precio algo más elevado que otros restaurantes similares. Tan sólo lamento no haber podido comer aquí en mi último viaje, por razones de tiempo. Otra vez será.


