Arantxa Jiménez
Un buen hotel a un buen precio
Si tuviera que resumir en una palabra esta sería “fantástico”. Excelentísima ubicación, habitaciones muy confortables y mucho gusto en la decoración... Un hostal que desde fuera no te imaginas lo que realmente vas a encontrar. Los recepcionistas hablan varios idiomas. El único punto negativo es que el desayuno lo tienes que tomar en una cafetería cercana y sólo ofrecen café y bollo. NO lo descartéis, no os decepcionará.