ANADEL
Encantador
Pues el sitio es tan bonito que pueden obviarse sus incomodidades, y es que no hay ascensor, el suelo está en desnivel, y el baño puede resultar pequeño.
Estamos en la preciosa plaza del mercado, en una centenaria posada con restaurante abajo donde se reúnen los pocos vecinos del pueblo, un lugar entrañable y encantador.
Tiene un buen desayuno en una moderna sala, y un recomendable restaurante.
+6