Hotel Casa Vieja del Sastre

- "Máma, ya he llegado a Cudillero, mira" (le envío una foto de la fachada de Casa Vieja del Sastre).

- "De cuento hijo, de cuento".

Bueno, pues esto es un poco lo que resume el fuerte de este hotelito. Cuidado hasta el más mínimo detalle, guarda una historia súper curiosa en su interior. Lo de Casa Vieja del Sastre no es un nombre cualquiera, cuando vayas no olvides pedirle a las dueñas que te cuenten la historia en cuestión. Y es que se remonta a muchos años atrás.

Lo meto es el club de los hoteles (rurales) de 3 estrellas que bien merecerían alguna más. La habitación que me tocó es una pasada, como todo el hotel estaba cuidada al detalle. Según andas por sus pasillos te vas encontrando con detalles encantadores. ¿Mis favoritos? Las máquinas de coser, sin duda. Siguiendo con mi habitación, no puedo olvidar que tenía una especie de patio-terraza con una silla preciosa y unas vistas típicamente asturianas.

Hotelito rural maravilloso a tan solo 2 km de la playa y de paisajes increíbles... El hotel es un "viaje a una satreria", su restaurante una maravilla atendido de una manera exquisita, y todo lo bueno que tiene el establecimiento esta multiplicado a la enésima potencia por su personal; Mar y su cocina junto con Amador, Patricia en la atención ,"vigilando" que todo este bien y Lara,dandote información y estando para todo.Increíble lugar, increíbles personas :)

Como siempre que vamos, el trato es exquisito, familiar, cercano. El hotel muy bien cuidado, aportando siempre detalles nuevos y sorprendentes. La tranquilidad y el sosiego es la marca de la casa.

Además, te ofrecen excursiones y visitas que se salen de las guías corrientes. Desatacaría su excelente repostería y bollería artesanal.

He ido con mi novio a pasar 5 días a éste precioso Hotel, en el cual he encontrado, profesionalidad, amabilidad con el cliente en todo momento, limpieza, tranquilidad, tanto Mar como Patricia, sus propietarias, hacen qué tú estancia sea lo más agradable posible, pendientes de nosotros en todo momento, sus desayunos y cenas de 10, exquisito todo.
Pronto volveremos pues han sido unas vacaciones de verdad. Felicidades chicas. Patricia A.

Es una antigua casona de 1890 reconvertida en hotel en 1999. Tiene la Q de calidad turística y si quieres encontrar profesionalidad combinada con trato distendido, todo el personal te lo puede ofrecer. Te proporcionan toda la información turística que desees, no solo del destino, si no de toda Asturias. Su restaurante, con un precio medio de 25 €, es muy acogedor y la carta muy atractiva.

El parking es gratuito y en la sala de reuniones tienes un punto de internet también gratuito. La decoración está tematizada en el mundo de la sastrería y no deja a nadie indiferente. Tiene una preciosa sala de lectura - biblioteca y te puedes tomar algo en la terraza del jardín. Por ahí corretean las mascotas de la casa: El prerro Whisky y el gato Ron, totalmente inofensivos. Es una grata recomendación de alojamiento en el municipio de Cudillero. Y la playa está a solo 2 km. Por cierto, el Camino de Santiago del Norte pasa por delante de su puerta.