Enorme habitación y buena ubicación.
Me alojé en este hotel en Mayo del 2011 y realicé la reserva mediante agencias de viajes (algo raro en mí, que soy "online forever").
Está situado a 150 metros de la estación principal de trenes de Bruselas (perfecto para otras excursiones) y a pocos minutos de la famosa Grand Place. Además el barrio es bastante tranquilo y hay varios restaurantes.
El trato en la recepción fue muy amable y nuestra sorpresa al llegar a la habitación fue mayúscula. Pedimos una habitación triple y directamente nos dieron una Junior Suite bien hermosa.
A la entrada se sitúa el baño (completo y con amenities) y enfrente la habitación. En la primera parte está la cama de matrimonio con las mesitas, armario y TV de plasma y, a continuación, ligeramente separada una salita con sillones, la cama supletoria y otra TV.
La luz que provenía del ventanal era abundante. Las habitaciones están bien insonorizadas y limpias. Imagino que las habitaciones dobles también serían espaciosas.
El desayuno se sirve en una salita con grandes ventanales. Tiene un poco de todo, aunque me pareció un poco escaso para ser un hotel 4 estrellas (incluso teniendo en cuenta que no es lo mismo que un hotel español de esa categoría).
La nacionalidad de los clientes era bastante variada, aunque predominan los españoles. Familias, parejas mayores y parejas jóvenes.
Recomiendo el hotel.


