Hotel de lujo
Un hotel precioso en Praga, de 5 estrellas y que realmente merece esa categoría.
Situado cerca de la ciudad vieja, a menos de 10 minutos andando, y muy bien comunicado por tranvía con la zona del castillo y de mala strana.
El edificio centenario, muy bien restaurado, tiene zonas comunes en estilo clásico, con biblioteca y zona de relax en maderas nobles y alfombras que te hacen entrar en otra época. El personal, comenzando por su director que nos dio la bienvenida en persona, y pasando por los amables conserjes, camareros y recepcionistas, es todo un ejemplo de lo que debería ser un personal de hotel en todos los establecimientos de esta categoría, atentos a todas tus necesidades en todo momento e interesándose y aconsejándote por tus planes.
La habitación que cogimos, de tipo superior, era abuhardillada (todas las superiores están en el último piso) y con vistas a la ciudad. Muy amplia, en 2 niveles y con wc y baño separados.
Muy buen sistema de aire acondicionado y de domótica para el control de las persianas y luces.
Sin duda volveremos a este hotel en nuestra próxima visita a la ciudad. Completamente recomendable.


