Pequeño Paraíso junto al mar
La palabra justa no es hotel ya que realmente son 9 casitas en un lugar privilegiado.
Mateo, el propietario, consiguió hacer realidad su sueño, al comprar este terreno pegado al mar y construir en él un pequeño complejo maravilloso.
Las casas , de un rustico muy cuidado, pueden ser de 1 o 2 dormitorios. Todas ellas tienen cocinita, salón y porche.
Hay una zona común bajo un gran árbol que da sombra y es ahí donde se hacen los desayunos, almuerzos y cenas. La comida es magnifica, siempre cocina tradicional griega. El precio es mas que razonable y el personal no puede ser mas amable. En ese gran espacio es donde se encuentran los diferentes clientes del "hotel". Se puede elegir comer cada uno en una mesa o mezclarse y unirse en una única mesa grande. La verdad es que la gente que va a un lugar así, suele tener mucho en común y es fácil encontrar a personas interesantes.
El plan del día es de lo mas relajante: playa, leer, comer, charlar y dormir.
La playita "casi privada" esta a 5 minutos a pie, por un sendero maravilloso. Hay un río pegado al complejo y esto hace que haya arboles. Además hay una piscina natural creada por el mismo río.
Desde la playita sale un barco pequeño que te lleva a Andros. Esto depende del viento ya que en función de este, el barco puede o no llegar hasta la orilla.
Mateo a llamado a este magnifico lugar Onar que en Griego significa sueño. Su sueño cumplido!!
Lo mejor es volar a Atenas y desde el puerto de Rafina coger un barco (18€) que tarda 2 horas y te lleva a la isla de Andros. Allí te recoge un chófer de Onar (50€) y una hora mas tarde te deposita en ese paraíso!!!
Por supuesto para el que no conozca Atenas, es imprescindible pasar un día a la ida o a la vuelta y visitar, La Acrópolis y el nuevo Museo que está junto a ella.