Sidney
He estado varias veces en este hotel y...
He estado varias veces en este hotel y tengo que reconocer que me gusta mucho. Se trata de un edificio de cinco plantas, la última abuhardillada que se encuentra en el centro de esta localidad pinariega. Es fácil de reconocer, pues posiblemente sea el edificio más alto y el único hotel del pueblo.
A pesar de tener sólo tres estrellas, cuenta con unas magníficas instalaciones. En particular, tiene un gimnasio al que no le falta un jacuzzi bastante agradable. De hecho, resulta de lo más apetecible darse un bañito en agua caliente (aunque es pequeño, puedes incluso nada en él) mientras en el exterior está nevando.
Las habitaciones (tanto las buhardillas, que son mis preferidas) como las dobles son muy amplias, bien decoradas y con una limpieza extrema. Los baños son también bastante amplios, aunque más parcos en cuanto a decoración.
Yo fui en rágimen de alojamiento y desayuno. Éste es tipo buffet y es bastante variado. Hay una sala en particular donde se desayuna, aunque el hotel también cuenta con cafetería, abierto a todo el mundo. Resulta curioso pararse a observar las fotos que hay colgadas en las paredes, pues se ve a la propietaria del establecimientos con los equipos de fútbol de primera división que utilizan las instalaciones del hotel o toreros de prestigio.
Lo mejor es la comida, tanto en calidad como por precios.
El personal es muy amable y en recepción te ayudan en todo cuanto precises. Puedes contratar rutas por la zona, lo cual es bastante interesante, porque el entorno es impresionante.Bien
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