m_eugeniacaceres
Podría decir que es un de mis hoteles ...
Podría decir que es un de mis hoteles favoritos en Portugal y eso no es poco, porque en nuestro vecino país hay lugares maravillosos donde alojarse: Sus maravillosas pousadas, su esplendidos rincones de turismo de habitaçao... Pero en cuanto a "hoteles" y en Oporto, no tengo la menor duda: EL VIAL GALÉ.
Lo descubrí hace años de casualidad y ¡¡nos encantó¡¡ en está ocasión nos acompañaba una de mis hijas, y los tres dijimos que no sería la última vez, que seguro que si volvíamos a Oporto nos alojaríamos allí una vez más. El pasado diciembre mi marido y yo decidimos escaparnos dos o tres días a nuestro querido país vecino y después de conseguir un vuelo baratito, regresamos a Oporto y por su supuesto a éste hotel.
Tiene dos puntos importantísimos para mi gusto: Su magnífico Spa en la planta 17 con sus maravillosas vistas de la ciudad y su pantagruélico desayuno con cava incluido, ¡¡que mas se puede pedir¡¡, a todo esto hay que añadir que su ubicación es muy buena a muy poquita distancia de la Praça da República (pleno centro) y con el metro en la puerta, si no se quiere caminar demasiado.
Las habitaciones son amplias, límpias, cómodas... Aunque en esta última ocasión y pese a que solicitamos NO FUMADOR, apestaba a tabaco, un punto negativo ¡¡lástima¡¡ y en el baño se apreciaba el paso del tiempo aunque solo habían pasado dos años.
Los bares y los salones son estupendos pero lo que me sigue entusiasmando en su gimnasio y el SPA, por un precio módico y alquilando un gorrito, se puede disfrutar de una tamaño-medio piscina climatizada, de una sauna, baño turco, jacuzzi y hamacas desde las que contemplar la ciudad a tus pies. Si aún te quedan ganas puedes hacer un poco de ejercicio en cualquiera de los muchos aparatos del gym, por supuesto con la vista puesta en otra panorámica de la ciudad.
Creo que no hay nada mejor para relajarse después de todo un día de pateo por esta esplendida ciudad portuguesa.
A la mañana siguiente y para reponer fuerzas, no hay nada mejor que los desayunos en este hotel, enumerarlo todo me llevaría mucho tiempo y seguro que me olvidaría de algo, solo deciros que para finalizar, una deliciosa copa de cava es el colofón perfecto.
El trato es exquisito, así que para que cambiar, vuelvo a garantizaros que en un próximo viaje a esta maravillosa ciudad yo tengo muy claro donde alojarme, ¡¡os lo recomiendo¡¡.
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