Iglesia de Nuestra Señora de la Victoria

No era una de las metas de nuestro viaje, pero era obvio que teníamos que rendirle una visita a esta Iglesia.
Y es que si eres español. y sobre todo tinerfeño, como yo, ir a ver al Niño Jesús de Praga, es como ir a visitar a un pariente. Me explico:
La Iglesia fue edificada en 1613, y a los quince años llegó desde España la diminuta imagen de cera del Niño Jesús, llevada desde Córdoba por Isabel Manríque de Lara cuando contrajo matrimonio con el noble bohemio Vratislav de Pernstejn, uno de los favoritos del emperador.
Da la casualidad de que parte de sus descendientes, llegaron a Tenerife, y mantuvieron la devoción por el Santo Niño, y de echo lla vestidura de color blanco que sale en la fotografía fue enviada desde aquí por la familia como uno de los más valiosos regalos a la Imagen.

En Noviembre cuando estuve en Praga, a la única iglesia que me habían solicitado desproceso ir era la Iglesia de Santa María de la Victoria (Kostel Panny Marie Vítězné), ya que me han pedido comprar en su Museo una figurita del Niño Jesús de Praga para llevarla a mi oficina.

La verdad es que su historia está muy vinculada a España, ya que debido a las dificultades de la fé católica que se daban en Praga, la orden de los Carmelitas Descalzos se hicieron cargo de esta iglesia.

Esta iglesia se ubica muy próxima a la Iglesia de San Nicolás en el Barrio de Mala Strana, y está advocada al Niño Jesús, cuya imagen se cree que tiene los orígenes en la historia en las ciudades de Córdoba y Sevilla, pero realmente fue donada por la princesa Polixena Lobkowitz a los carmelitas.

Su construcción se inició entre 1611-1613, este edificio fue uno de los primeros templos luteranos construido en Praga Esta iglesia es considerada como una de las primeras barrocas de Praga, con su nave central abovedada y sus dos torres monumentales. En 1620, tras la derrota checa de la Montaña Blanca,  la iglesia es tomada a los protestantes y dada a la orden católica de las Carmelitas Descalzas. Pero más que por el edificio en sí, esta iglesia es conocida porque en ella se venera al Niño Jesús de Praga.  Es una estatuilla votiva de cera, de unos 47 cm de altura y que representa a Jesucristo en su etapa infantil.

Esta iglesia la encontramos de vuelta al centro tras visitar el Monumento a las Víctimas del Comunismo. Por fuera la iglesia es bonita, pero por dentro es realmente curiosa, principalmente por la gran colección de vestidos para "El Niño Jesús", una imagen de la etapa infantil del mismo.

A mi personalmente lo que más me gustó fue una colección que tienen en una salita dentro de la iglesia con diferentes representaciones de Belén, todas ellas de diferentes países y con diferentes materiales.

Tranquila y relajante.