A la espaldas del Alcázar, justo al ...
A la espaldas del Alcázar, justo al lado de los dos aparcamientos existentes en dicha zona, se halla una pequeña capilla que se ha dado en llamar San Miguel el Alto por su situación dentro de la ciudad imperial.
Es un templo del siglo XII que fue remodelado en el XVII por Juan Bautista Monegro. Aún se conserva su torre mudéjar, con arquerías ciegas, y el patio claustral.
Es de planta rectangular, sobresaliendo el presbiterio. Se distribuye en tres naves similares con artesonados de madera y crucero cupulado y bóvedas de medio cañón.
Esta tipología corresponde a una iglesia templaria, función para la que estuvo destinada esta capilla en lo alto de la ciudad de Toledo. Eso también explica su peculiar cobertizo o capilla mayor al estilo de los conventos toledanos, pero inusual en templos abiertos abiertas al culto público.