Iglesia del Pilar (barrio de La Recoleta)

Pegada al fantástico cementerio del antiguo Convento de los Recoletos (de donde el barrio de La Recoleta tomó su nombre), la preciosa iglesia de Nuestra Señora del Pilar (comúnmente llamada 'del Pilar') es una de las más antiguas y emblemáticas de Buenos Aires. Su fundación data de 1732, y su estilo colonial es de una entrañable sencillez. Blanca, con una fachada asimétrica, la iglesia posee azulejos preciosos (originales de Talavera, España) y retablos en madera policromada típicos de la época de la colonia. El altar mayor, barroco, es especialmente bonito, con detalles en la platería que denotan la mano indígena de sus artesanos.

Perteneciente a la congregación de los monjes recoletos franciscanos, esta sencilla Basílica es una iglesia barroca totalmente pintada de blanco, que aún conserva en su interior los mosaicos de talavera originales, imágenes sagradas como las de San Pedro y la Crucifixión de Cristo desde la época de su construcción. Entrar allí y respirar paz y tranquilidad en medio del ruido exterior es casi, casi, un milagro. Siempre me gusto, tuvo y tiene un significado muy especial para mí ya que mi madre se llamaba Pilar en honor a la Virgen a la que la Iglesia fuera consagrada. Me emociona tanto estar allí que hasta olvido sacar mi cámara para fotografiarla, ya que sólo me inspira contemplar.

La Iglesia del Pilar es la segunda más antigua de Buenos Aires (siendo la primera San Ignacio de Loyola). Su fachada austera y blanca con el frontis clásico, remite en parte a la simpleza de las capillas del norte del país, pero en ella se destaca la preciosa torre revestida en azulejos, que la hace tan característica. El interior en cambio es más barroco y se pueden ver importantes esculturas del siglo XVII y XVIII. La Iglesia era parte del monasterio de los Monjes Recoletos y su claustro es hoy el Centro Cultural Recoleta, uno de los principales espacios de arte y cultura de la ciudad.

Junto al cementerio de la recoleta.