Sebastian Muñoz
El edificio más famoso de Timisoara.
La Catedral Ortodoxa Serbia es sin duda alguna el edificio que más llama la atención a los visitantes que recorremos el casco histórico de la ciudad de Timisoara, al oeste de Rumanía. Se encuentra frente a la Plaza Uniti, a unos minutos de caminata desde el centro geográfico de la ciudad, y fue construida a mediados del Siglo XVIII.
Además de ser uno de los principales sitios de oración para los creyentes ortodoxos en Rumanía, la iglesia sirve también como la oficina central de la Diócesis Ortodoxa Serbia de Timisoara. Dada la ubicación de la ciudad –no demasiado lejos de las fronteras con Serbia y Hungría-, el culto ortodoxo se encuentra muy presente en esta parte de Rumanía.
El edificio en sí es una de las mejores representaciones del barroco en el país. Sin embargo, la construcción original –que fue destruida durante un incendio en 1728- era de una arquitectura más sencilla. Después de la reconstrucción se construyeron también las dos torres que hoy se encuentran a los costados de la nave principal. Además, los iconostasios del interior fueron esculpidos en madera por el artista Mihailo Janic, mientras que las pinturas tanto de las paredes como del altar son obra de Constantin Daniel Timisoara.
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