Una joya , descuidada
En la provincia de Quispicanchis, al sureste de la ciudad de Cusco, su antiguo nombre Antawaylla, que quiere decir "pradera cobriza", hoy sus tierras siguen gozando de fértiles valles Andahuaylillas.
Entre sus atractivos encontramos esta bonita iglesia custodiada por tres cruces, que representan la Trinidad (Padre - Hijo - Espíritu Santo), conocida como la "Capilla Sixtina" de América. Fue construida por los Jesuitas en el siglo XVII, una iglesia colonial frente a la Plaza de Armas.
Aparentemente sencilla, con gruesas paredes de ladrillos de barro, su fachada con murales pintados en las hornacinas en tonos ocres y que arranca del suelo con dos orgullosas columnas de piedra. ¡Una curiosa balconada de madera pintada!
En su interior destacan los frescos que cubren tanto paredes, los arcos y los techos policromados, una maravilla de interior. Con dibujos geométricos y florales que decoran los zócalos, en gamas de azules y pan de oro.